LUIS ADONAY VENEGAS LEYTON

Pájaro errante, siempre libre

Pájaro errante, siempre libre

 

Desconocido…sin nombre

que viene desde lejos, del fin del universo

Parece que vuela desde hace mucho tiempo

por geografías infinitas, sin contornos ni lados

montado en lomo de aire…le ha traído la brisa,

sus alas  se mueven lentas, están con poca fuerza

semeja la espuma del mar que flota y se queda

en espera…

 

Alma que vuela,  que transita, llevado por la luz

de un mundo infinito

que sustenta, que imagina ideas buenas

como muchos otros hombres y mujeres

que pasaron y dejaron huella

intentando ser libres…

 

Pájaro cansado, aterrizando en el umbral del viento…

¿Cuánto tiempo volaste buscando un lecho…?

Para entonar tu canto con música propia

y melodía clara…

Tanto tiempo…tiempo largo,

para madurar los versos

buscando un hombro para apoyar tu cabeza

y contar tus cuentos...

Eras tiempo pasando… eras vagabundo,

eras presente y también futuro

siempre soñando…

Nave errante de desconocidos mares.

 

Tus cuentos de aguas, tus versos de naves

volaban contigo…

abrazando las nubes que viste de niño.

Creciendo aprendiste a distinguir la belleza…

todo era bello, todo era sueño,

cambiaste tu mundo de pueblo,

transitaste la selva de ciudades

caminaste el universo…

y de él aprendiste

- enseñaste…

o al menos intentaste,

entregar lo mejor, contando tus versos…

 

Originando vaguadas, vaciando tu canto

como vertiente transparente,

palabras simples de voces de adentro

que explotaron de improviso,

sin anuncio, sin aviso

como voz de recuerdos haciéndose oír,

- escuchando el silencio.

Trashumancia del alma,

pájaro errante, en sus vuelos finales.