argantonio

Mi amigo el libro

No supe hasta tarde lo que era amar

En aquel inmenso cuartel y convento

Ocultábamos el ardiente sentimiento

Del que espera con pasión un azar.

 

Leía para escapar de un negro presente

Que era un sinvivír duro

Sin ilusión y sin futuro

El alma joven en su tierra ausente.

 

!Cuantas tardes de paseo junto al río!

Solo con mis pensamientos

Dejándolos llevar por la lenta corriente.

 

Hasta el mar ya cansado y sin poderío

He dado de pasos cientos

Preguntándome lo que tras un beso se siente.