Magia se respira por sus calles
llenas de humildes gentes
que con su dulce mirada
llegan al fondo del alma.
Mujeres con ropas de vivos colores
que llevan a sus niños con amor,
India que palpita
con rapidez y con misterio.
Respiración religiosa
en los templos sagrados
donde los fieles meditan
y rezan con respeto.
Los turistas buscan aquí
paz y alegría,
la inocente sonrisa
de una criatura
es un regalo especial.
Caos maravilloso,
olor a especias,
manjares para la vista
y delicia para el paladar.
Es India un bello país,
es todo corazón,
y aún en su pobreza material,
es rica en alegría
y musicalidad.
Las jóvenes hindúes
bailan bollywood
en las miles de películas
que allí se filman.
Sus habitantes,
hospitalarios y sinceros,
construyen con su bondad,
una atmósfera
única y limpia de maldad.
Viaje de contrastes
música hechizante,
voces finas de mujer
que arañan con fuerza
y dulzura el espíritu
de aquellos que dejan
sus pasos libres
en un abanico de colores.