Hay un suspiro internináble
fruto de una garganta rota
de frases y de silencíos, en el aire
el alma se desboca, caballo
de batalla, en esta vida loca
almacén de soledades, son
las eternas enfermedades
que tiran de la razón
conviertiéndo la vida
de desgracia en descracía
en un pobre bufón, al que
el dolor Psíquico acompaña
me roba, me miente, me engaña
me rompe el corazón, y me lleva
por la calle de la amargura
de la razón a la cordura
es triste ver, como las luces
se van apagando, la vista
hace huelga, la mente me va
olvidando, se seca la fuente
la hierba verde, se convierte
en pasto, solo el amor resiste
las fabricas, están cerrando
la señal no tiene cobertura
voy camino de la locura
solo la niñez me acompaña
en este viaje, me confórta y
me cuida, junto a mi divina
esposa, y Dios, otra de las
cuatro rosas, de mi roto
corazón, mi cantar añejo
se mira en el espejo y
¿ que ve ? ¡ a un pobre viejo !
enfermo y cansado, que todos
dan de lado, y arrancan hasta
el pellejo, se abusa demasiado
de los desgraciados, de los pobres
y de los enfermos...
Vivimos en un mundo de malvados...