Usan los próceres la patria y Dios,
como una pía y grandiosa pantalla,
el prócer es astuto donde lo haya,
gran actor desde sus propios platós.
Se acuerdan del pueblo llano,
solo cuando necesitan el voto,
los usan para un cosido o un roto,
y mienten llamádolo hermano.
A las pruebas humildemente me remito,
se comenten tantos desmánes,
en nombre de lo humano y lo divino.
Para terminar en un te quita o te quito,
somos peor que los alacránes,
y sumisos corderos que ignoran su destino.