Me encierro entre la niebla del ayer,
Rumiando los recuerdos que me dañan
Fantasmas del pasado que se inflaman
Y sangran vieja herida con placer;
Montañas de penumbras del no ser,
Inmensos nubarrones que amenazan
Con lluvias, con tormentas, que se afanan
En hacerme morir por lo que fue;
Cuán torpe mi actitud de no olvidarme
De toda la cizaña que quedó;
Debería intentar más levantarme,
Limpiar en el Leteo tanto error;
Es torpe pretender sólo dañarme
Y no buscar la luz en tierno amor…