DULCE ARREPENTIMIENTO
Me arrepiento del tiempo
en la que muchas rosas,
con sus finas frescuras,
enajenaban mis ojos;
y mis labios humedecían
de tan néctares deseados,
donde mi rostro,
al igual que la mitad del cielo,
se encendía con los arreboles del ocaso.
Autor. LMML.