Exhibiendo sus músculos, caras bonitas
esculpidas sobre mentiras
y grandes traseros,
que exhiben pensando
en pura fantocheria, y fantasía.
El materialismo les robo el alma,
sus prendas caras y lujos son su mejor arma.
Mataron la humildad,
vaciaron sus cabezas,
y ahora solamente piensan en fiesta.
Viven de fotos y comentarios,
gentes sin mentes, que no varían,
corazones raptados por la vanidad
se han dejado hurtar la intimidad.
Adictos al sistema y sus enredos,
viciosos de la vida social y también de sus inventos,
Babilonia, una ironía,
el mundo perfecto en el que no hay lugar para la sabiduría.