Yo creí en mis ilusiones, en mis sueños
Confié que serias el sueño que nunca soñé
Te entregué mis versos y suspiros
Como testimonio de algo que añoré.
Amarte me sirvió sólo para exiliarme del amor
Para sentir dolor de huesos en el alma
Y mi cuerpo cansado y vacío
Vagó por jardines de troncos secos.
De qué me sirvió amarte
Si me jugué el destino por quererte
Destruyendo cada paso de mi vida
Si para ti todo se olvida
Tu mente atorada de recuerdos inventados
Tu corazón que sólo sabe despreciar
Tu cuerpo que sólo sabe del placer
Todos eran cuentos ya contados
Mirándome en el espejo desvencijado
Quise maquillar mi cara con sonrisas
Pero como son las desagradables sorpresas
Vi sólo mi rostro envejecido.
Es triste mi bien amada
Mojar almohada tras almohada
Vestirme de olvido
Sin poder olvidar nada.
Lima/ 31/7/ 17