Y este tiempo que pase
a la deriva, con este corazón
a medio morir, no me quedo
mas razón que la de tus lágrimas
y tu pesar del lento réir.
No le quedo más a mi corazón
que cada parte de mi se dedico
a tu mirar que cada noche iba cobrando
ecos de la sonrisa que apárcas en tu ser.
Que no le quedo más a mi ser
que cada parte de mi corazón
se dedico a perder, por el latir de
un mar que quizás, llegar, nunca
llegara.