Llévame al inframundo de la alegría y de la paz,
adóptame en tu reino te lo suplico amada diosa Artemisa reina soberana de la belleza;
rescátame de este mundo de maldad y te prometo q te donaré mi tesoro más preciado,
te regalaré mi corazón, azótalo, escúpelo, pero ten en cuenta que éste es mi sacrificio más valioso.
Deambulemos en el universo, vaguemos en el cosmos, allí no abra tiempo, allá no abra oscuridad...
Vamos amada reina sé mi madre, mi amante o mi mujer...
Derechos reservados: Iván E. Velandia L.