Que contenta iba en mi todo terreno
cuesta abajo, cuesta arriba, sin frenos
me gustaba como corría, gritaba de alegría
mi madre lo conducía, eso si, sin carnét
soñaba y dormía, al son del baibén
era la envidia del parque automovilístico
de mi pueblo, El Altét, los domíngos
salía a tomar el café, y a pasear hacía
buen día, para correr por la autovía...
Que bonitos son los sueños de niños
se recuerdan con cariño, toda la vida
y se guardan en el corazón, nunca se olvidan
Ay mi carrusel, cuanto viajé, y hasta pasé la ITV...