Tú y yo,
Dos dilemas en una realidad,
Nosotros.
Somos dos caminos entrelazados por las esquinas
Que oscilan cuando la pasión los recorre
Que convergen en la frontera de la compañía
Y desembocan donde la soledad corrompe.
Somos los autores de una sonata de dos movimientos,
un allegretto, marcado en tus ojos por la esperanza
y un réquiem, dueño de mi conciencia y mis sueños.
Estás a una distancia considerable de mi alma
e ignoras la sentencia de desamor que mi corazón grita
pero, ay de mi cuando tus palabras borran la brecha!
reverdecen la zarza que estaba en cenizas!
“Nosotros”, -¿cómo llegamos a serlo?-, me pregunto,
tal vez ha sido el destino o la suerte…
pero estamos juntos sin tiempo y sin futuro,
compartiendo los despojos de nuestra mente.
Tú y yo,
La idea más peligrosa que me ronda
¿Serás el perpetrador de mi alma?
¿Serás mi sepultura?
Nosotros!
Si perpetras mi alma, tu marca la llevaré con gusto
Si me llevas a la muerte, que tu nombre sea mi sepulcro…
Prefiero morir en vida amando
A no amarte y vivir con rumbo.