Los cristales de la noche ,
en rocìo se tornaron ,
y abrazaron tus flores ,
acariciando tus manos ,
cuando las llenabas de ternura .
Algunas con tu calor se abrieron ,
y te miraban como si fueras su mami .
Yo era un espectador feliz ,
disfrutaba como tu encanto y arte ,
se unìan con la bella expresiòn de las flores .
Que pronto saldrìan a continuar el amor ,
que transmiten y recibe el destinatario .
El dìa fuè intenso ,
muchos arreglos se fueron ,
diciendo adiòs querida mami .
Y tù sonreìas ,
y esto era un agregado màs ,
que quedaba impreso ,
en la fragancia de las flores .
Todo lo que miraba ,
me causaba un cielo de ternura ,
que se introducìa por mis ojos ,
y mi corazòn se llenaba de vigor .
El dìa quedò como inolvidable ,
y lo retomarè en mi caminar ,
para cultivar tu amor .