Vivo a caballo entre...
Chapotear entre dos aguas, aceite.
No ser ni lo uno ni lo otro.
Indeciso.
No ser de tuétano joven ni ser de
médula vieja, no ser ni carne ni
pescado.
En el ecuador de un camino que
prefiere ser recto, mas me afano
en convencerle de que me ofrezca
curvas, recovecos donde poder
perderme para encontrarme.
Barloventear sin viento, negarme
a las fuerzas que me empujan al
abismo, al infierno, solo admito
el infierno del amor, de la sonrisa.
Perderme en una selva de silvas
que lancen al aire mis miserias.
Vivo a caballo, en el punto de
equilibrio de dos energías: una
que me empuja al cielo y otra
que trata de convencerme de lo
contrario.
¿A qué Pepito grillo hago caso,
al negro o al blanco?
Gracias por arrojadme luz.
Os comunicaré mi decisión.
Pronto...