Vos princesa, que si de mis adentros
un suspiro del alma
lloro, será más que por ti, sera
por tu amor.
No pido a vos que desdichada
seas, ni que lágrimas llores por mi,
pues itinerante, como el nómada
pongo a la venta mi sosegar.
No te pierdas, que aquella
Luna, llegara, en ti se posara
y con viento fresco, te susurrara
lo que en verdad este corazón por ti siente.
Siempre se lista, mi amada,
que gato por liebre muchos
querrán darte, pero lo que te ofrezco
por mi trasegar, no es un sueño.
Yo no tardare, ni renunciarte,
te buscara y si perdido tu corazón esta
yo lo encontrare.