No hay un lugar como este
montañas y profundos bosques
donde entre verde y azul el horizonte se esconde
y el alma escapa así a la ligera.
Cadenas de montañas, pura sierra
con olores de vida que latentes
recorren las laderas de la mente
y encuentran otras vidas que antes eran.
Amanece despacio suave la bruma se eleva,
densas nubes fantasmales que viajan en el follaje
mágicas, etéreas, sedosas, y derrama en las ramas
las lágrimas de la aurora.