EL AVE DEL BOSQUE
Esa ave que canta al son de la tarde
con leves acentos de música suave,
parece una lira que vibra en el bosque
ciñiendo los vientos con nuevo tatuaje.
Su pico rojizo desgrana en el viento
las notas que violan el tenue silencio;
y allá sobre el bosque, tendidas sus alas
se ven como sombras que visten de negro.
Su cuerpo extendido; su bella silueta
se enreda en el viento que duerme la tarde;
y el sol con sus rayos opacos y fríos
proyecta en el bosque la sombra del ave.
Y luego a su nido desciende tranquila,
huyendo a la noche que ya se apresura;
se pierde en el bosque callada y serena
y abriga a sus pollos del rayo de luna.