Nada te aparta, nada te excluye, vives aquí de siempre en mí
De sien a sien, en el centro del pecho, y te miro, a mi manera
Liadas el alma, atadas las vidas, de juicios y aciertos en concierto.
Así te recuerdo, alegre, sutil, con poesías y canciones de ti
Constante, feliz en la vida, con tu alma noble y sensible de ti
Y sobre nosotros destellos de sol y de luna, y lumbres de ti.
Alcanzando todo sin fin y la magia de lo existido, hacen,
Que nazca un regalo de almas arropado de ternuras sublimes
Incomparable, inmenso soñado y esperado sin fin.