AZULNOCHE

ENSALADA DE FLORES

La noche estaba fresquíta,

en una terraza al aire libre me senté

pedí una ensalada

y allí me las encontré.

 

Cuál fué mi sorpresa!

abrí mis ojos a su belleza

los pequeños pensamientos

llamados violas,

de muy vivos colores 

morado-naranja, amarillo-malva

cubriendo su piel de suave terciopelo

regadas de aceite.

 

Flores comestibles

cultivadas con amor 

mis ojos las veían 

no se las querían comer

más al final he de reconocer

fueron un exquisito manjar.

 

Me topé de frente 

con las flores

y su lenguaje olvidado

donde pensamiento significa, recuerdos...

La riqueza de la naturaleza

ofrece diálogos llenos de afecto.

 

Sus flores, todas

nos transmiten mensajes.

Su belleza natural

unida al lujo de la palabra escrita.

 

Cautivada me sentí 

por su sabor suave dulce-agridulce,

y su aterciopelada belleza 

rodeada de verdes .

 

 

12-8-2017