Siempre sé que debo matarte primero para poder morir.
Siempre sé que duele por ti y por mi
siempre tengo la mala costumbre de entregarme y entregarles el dolor a las personas que amo, de saberme nada y aún así apostarles que puedo serlo todo.
Siempre sé que es mejor estar lejos,
siempre sé que es mejor ser silencio a amor,
siempre sé que disparo más fácil que lo que abrazo, que cuelgo más rápido y aprieto el nudo más fuerte que lo que me aferro a la vida.
Siempre lo sé y el que lo sepa no significa que lo pueda evitar.