Esta vida dura que me tocó vivir,
borró en mí todas mis ilusiones,
entregué todo mi amor para no sufrir,
pero solo recibí de ti desilusiones.
Borraron todo mi romanticismo,
hoy veo cada día como acaba la tarde,
sin un suspiro mío con algo de cinismo,
hoy me duele ver aquel amor cobarde
Destino mío tú que me conoces
tú qué sabes cómo me entrego al amar,
te pido por favor que no te marches
sin antes de secarme mis lágrimas al llorar.
Pero así estaba escrita esta historia,
así tuvo que suceder con este amor,
amé tanto que creí estar en la gloria,
pero al darme cuente vivía en dolor.
Ya no tengo tiempo para mis pensamientos,
ya no busco tampoco refugio en otra ilusión,
estoy cansado ya de tanto sufrimiento,
hoy quiero darle paz a mi pobre corazón.