ADANS BECMAN

CON EL AGUA AL CUELLO...Y SIN SABER NADAR.

Al nacer, cada uno tomamos

distintos caminos, unos somos

esclavos, otros son señoritos

ya desde pequeños se nos marca

una marca en la frente

para que todo el mundo sepa

que somos diferentes,  y ahí

empieza la condena, los dolores

y las penas, las cadenas son

transparentes para que no se vean...

Hace poco me miré al espejo

ya que la gente me trata como

a un bicho raro, que susto me llevé

vi a alguien, feo, enfermo, demacrado

sumído en la tristeza, desesperado

me pregunté ¿ Ese soy yo ?...

Ahora comprendo porque todos

se ríen y me dan de lado ¡ Ya decía yo !

Tenia razón , pero eso no consuela

fuí poco a la escuela, solo estudios

primarios, enfermo muchos años

pobre de nacimiento, hasta ahora

pero no me lamento, ¿ Para que ?

lloro para mis adéntros

cuando nadie me ve, finjo estar contento

y no se si tengo razón, al escribir

unos escriben con la mente

yo escribo con el corazón

por eso somos tan diferentes

y a veces pienso, cosa rara en mi

que lo que escribo no vale nada

lo que vale, es lo que me cuesta escribir

yo no uso tinta, uso lágrimas

me salen mas baratas, y tengo en cantidad...

Mi querida esposa, minusválida como yo

es mi fiel compañera, de fatigas y dolor

me ayuda me mima, me cuida

es una bendición de Dios, es tierna

cariñosa, compasiva,todo amor

por ella daría la vida, es la dueña

de mi corazón, ella es la encina

bajo su sombra vivo yo, ella me anima

a escribir, sin ella yo no estaría aquí...

He estado varias veces a las puertas

del manicómio, pero no he entrado

porque dicen que ponen mal de comer

y aquí estoy con permiso de ustedes

como no he ido tampoco a la universidad

lo poco que escribo me sale mal

pero tengo esa ilusión, perdonen

el atrevimiento, no puedo hacerlo mejor

algunos, nacemos vivimos y morimos

con el agua al cuello, y sin saber nadar...