Quiero ser como la luna,
amorosa y osada
dispuesta a demostrar,
que en la vida hay que arriesgar
para perder o ganar.
Yo sabía de su magia
de al amor estimular
y hacer a los poetas,
que se puedan inspirar
pero entender no quería,
que pudiera controlar
al rey, el astro universal,
se atreviera a desafiar
hacerlo no pudiera,
con sus rayos alumbrar
y tener la osadía
de poderlo ocultar.