¡Entre penas y glorias apareciste! Tocando mis extraños anhelos… Cautivándome con la dulzura de tu aliento… Y haciéndome perder en un loco padecer. Son tus ojos los que me embrujan, Son tus labios los que me tientan, Y tu cuerpo el que me estremece Es tu alma la que me toma y no me deja, Es tu ser el que representa mi delirio… Soy adicta a ti, a tu misteriosa esencia, A querer tenerte y no saber como poseerte, Soy esclava de mi mente al querer pensarte día y noche, Sin que logres apartarte de ahí… Siento que me pierdo en tan solo pensamientos; Porque de mis sueños jamás has logrado salir…