argantonio

La consagraciĆ³n

En la ciudad de la gracia,

cuando llega la primavera,

la fiesta de pasión es la primera,

en rememorar de Cristo la desgracia.

 

Y es que el hombre necesita creer en algo,

porque en primavera es cuando más se siente la soledad,

si no hay nadie a tu vera, no te engañes vives en orfandad,

y te sientes tan pobre y abandonado como un galgo.

 

Pero la primavera es también consuelo,

para pobres y ricos,

aunque no tengan conpañía.

 

Celebrando la consagración del duelo,

en acogedores apríscos,

donde reine la alegría.