Estaba ahi sola, esperando su comida.
Rara vez la veia salir de su casa.
Yo estaba cerca pero aun asi no podia mirarle los ojos (no veo muy bien) trate de acercarme pero no podia, le tenía miedo. Ella era intimidante, diferente a las otras, un poco más grande, no tanto como para matarme pero si como para darme cierto rechazo, tomar cierta precaución.
Podía sentir como ella me miraba con miedo, es que era asi, para mi ella era peligrosa y ante sus ojos yo era un mounstro, uno de los dos debia morir, y tenía en claro que no iba a ser yo.
Asi que agarre un zapato y mate a la araña, me senti un poco culpable, pero tenia que sentarme a escribir mis poemas, estaba inspirado.