Al sellar los ojos, reventar
El impulso como un eco
Del espíritu aventado
Contra la historia
Ser el padre de quién ya fuí
Hijo, ser el abuelo de quién
Ya fuí, padre y así para atrás
Al morir comenzar caminando
Hacia el pasado, renacer
En mi ascendencia
Imagínate a tí, mujer, siendo
Tu madre y luego al morir
Siendo tu abuela, sin saber
Sin fin sin fin hasta acabar
Los ramajes de este sagrado
Árbol del desconocimiento
Que al acaba al comenzar
En la piedra ensangrentada
Del fulminante fundamento
Por vivir el hambre, vivir
El fuego de siglos pasados sin saber
Por qué ir desencadenándolo todo
Sin querer, el haber pretendido
Que todo llegará tan lejos, creí
Que eran actos cotidianos
Carentes de eternidad y luego
Saber enrojado el hilo siniestro
Que conecta las cosas
Saber que no
Sabrás jamás el sentido
De este movimiento eterno
Son tragedias en la fundación
Que ya no verás porque habrás
Olvidado ya el como ver
¿Tanto por qué habrás olvidado?
Aprender a mirar en cada vida
A leer, aprender a desligar el paso
Del próximo paso dado
Una caída colosal
Te preguntarás
¿Es necesario volver a vivir
Este pasado? Por comprenderlo
Por ya aprender
A borrarse la huella del camino
Por dejar una sorpresa
Un malentendido
Sin entender como hubo
De haber pasado
Todo tal cual
-Quisiéramos saber el por qué
Y encaminar la ruta
Hacia la evitación del castigo-
¿Desde dónde vamos? ¿Hacía
Dónde venimos? Es casi
Básicamente lo mismo
Al seguir una ruta trazada
Por los urgentes deseos
De una legión de fantasmas
¿Por qué segimos ebrios en aquel
Curso trazado? Por lo mismo tomamos
El volver al final que iniciar al fin
El proyecto utópico-humano