En el amor las reglas, son demasiado claras,
El corazón las tiene, bastante definidas,
Con un sistema propio, de tonos y medidas,
Cuando provocas daño, ya nunca lo reparas.
Lo sentimientos marcan, si existen cosas raras,
Los sentimientos buenos, alegran nuestras vidas,
Los sentimientos raros, provocan las partidas,
Del corazón más bueno, que pronto maltrataras.
Abismos amorosos, jamás imaginaba,
murió la flor distinta, de tantos admirada,
llegaron aguas turbias, al manantial azul.
Con ese cataclismo, todo se terminaba,
la miel de las abejas, se vio contaminada,
fantasmas despiadados, salieron del baúl.