Siempre regresas a mi nada, me abrazas
y no hay espacio en mi que tu TODO no cubra,
tu permeable ser mi espíritu alegra,
y gratas transfusiones de amor recibe de ti mi alma,
un solo recuerdo y la historia completa se renueva,
vuelvo a palpar tu sonrisa y del brillo de mis
ojos como cada vez vuelves a ser el dueño.
Lo sabes, siempre vuelvo al nosotros,
porque tu esencia me envuelve, me alcanza...
no puedo desatarme de los fuertes hilos de
amor que a ti me atan.
¿Me lees? Cierra los ojos, ahora dime...
¿Recuerdas como temblaba en tus brazos?
Cuando mi cuerpo alineado a tu hemisferio
quedaba.
¿Aún lo sientes?
Te diré, yo todo lo vuelvo a sentir y vivir
con la visita de tus recuerdos,
no existe modo que de ellos quiera
yo librarme o soltarme.
Recuerdo aún enamorada como de tu savia
yo me perfumaba,
también extraño los suspiros que mi
corazón por ti liberaba,
cuando tus manos tibias las mías
dulcemente acariciaban.
Todavía vivo tanto y todo de ti
aún endulzo mi primer café de la mañana
leyendo tus poesías,
en cada verso sigo sintiendo que tu
presencia me acaricia,
como lo estás haciendo justo ahora,
mientras mis manos mi sentir por ti
en estas letras dejo evidenciado.