No existe mayor deseo en mí que Ella misma. Entera, completa, imperfectamente perfecta, con sus virtudes, con lo que sabe y lo que está por aprender.
No existe nada en este mundo que pueda desvirtuar mi amor por Ella, que si me pusieran a elegir entre ganarlo TODO y una vida a su lado, indudablemente les diría que ya la tengo y que Ella es MI TODO.
Que por Ella me convierto en esclavo y pagaría mil condenas. Sería capaz de empeñar mi vida, entregar mis ojos y hasta mi corazón si Ella los necesitara.
Si Ella se perdiera, la buscaría, caminaría sobre el fuego distancias enormes bajo el sol, lucharía contra quien sea y mil dragones para encontrarla.
Que mi único y más grande anhelo es el amarla, cuidarla, saciar su interior de miel y flores y que este amor que llevo dentro sea lo que para siempre Ella añore.
C.