Con ojos al vacío
y la mirada absorta,
penetro en el misterio
de increados espacios.
Dentro de mí perderme
e ir a la última estrella,
que toque el infinito
y el fondo de un abismo.
Saber que cada cuanto
empapado en tinieblas,
sin proyección eterna
me quedan confusiones.
Camino a otros lugares
y emigro sin diamantes,
dejando mis verdades...
son soplos entre niebla.
Hugo Blair M.
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