Siniestra esta la noche
y me arrojo en su silencio,
mí corazón se a agrietado
busco su voz para salvarlo.
Siniestra esta la noche
ayer corríamos juntos,
pero el ayer solo queda
¡en nuestros corazones!
Siniestra esta la noche
en los sueños no la veo,
sus pasos han desaparecido
en el tejer del tiempo.
Siniestra esta la noche
el alma pide perseguirla,
y que su cruel ausencia
se evapore de mí vida.
Siniestra esta la noche
mañana saldrá el sol,
igual serán días opacos
hasta que una ráfaga vea
¡De su dulce resplandor!