Sin necesidad de viajar,
Me invitas a explorar tu cuerpo,
A humedecer tus labios con los míos,
A domar las salvajes olas del mar.
Y esperar la cristalina agua de los ríos.
Sin necesidad de viajar a otro lado,
Construí un puente imaginario de rosas,
Que une nuestros deseos,
Con versos y prosas.
Sin necesidad de viajar,
Me acompañas todas las noches,
Hasta llegar el ocaso,
Disfrutando cada segundo hasta desmayar.
Sin necesidad de viajar a otro planeta,
Me conviertes en poeta,
Con nuestros cuerpos unidos,
Ves las estrellas con los ojos cerrados,
Y me enloquecen tus excitantes gemidos.
Sin necesidad de viajar en una nave espacial,
Sin bajarte de la cama,
Sabes muy bien que para mi eres especial,
Y que soy el hombre que te ama.