Por tu primer llanto al nacer, en mi alma se encierra
La presencia de Dios y la más grande alegría,
Por tus ojos alegres, abiertos en la Tierra,
Habrá lágrima y tristeza en mis ojos un día.
Por esa sonrisa que mis dolores destierra,
En mis labios se asentará la melancolía.
Por tu frágil manita que a mi dedo se aferra,
De acero templado habrán de volverse las mías.
Porque cambiaste mi vida con tu primer llanto,
Por esa vida que empieza, de esperanza llena,
Sé que voy a reír y sé que voy a sufrir tanto.
Pero sabes hijo, que al ver tu mirada buena,
Aún sabiendo lo que me espera no me espanto,
Porque después de todo… habrá valido la pena.
Army31