Lore Cruz

DIARIO DE UN SECUESTRO

Aire es fresco,
brisa de mar,
sol centelleante de energía,
vamos a caminar.
Toma mi mano hijo,
hoy es domingo ,
el mundo hemos de conquistar.

Que es lo que siento,
porque el viento frío,
porque el sol congelado esta.
Existencia de mis pasos,
quien té arrancado de mi mano ,
porque súplicas libertad.
Enterrado en una mazmorra,
sumergido en el sepulcro,
camina el alma de mi muchacho,
quien ya toca los linderos del desquicio y la preocupación.

La amargura,
pan diario a su aflicción,
con más agonía que espanto,
con más insomnio que miedo,
con menos fé y más llanto,
va olvidando los días,
no le importa el calendario,
solo quiere correr a brazos de papá .
Mis pies están enfermos de tanto buscarlo,
quien le ha quitado sosiego,
quien a cambio de tres pesos le ha robado la sonrisa
y la esperanza del mundo cambiar.
Sus melodías se confunden con el espantoso ruido
de las cadenas atadas a sus tobillos.

¡Mi hijo secuestrado esta!

Solo el Altísimo sabe,
la pena que hoy me habita,
he desgarrado mi piel
todo por él lo he entregado.

¡Devuélvanme a mi muchacho ya!

Le entregó mi alma al infierno,
suplico agonizante...

¡Denle su libertad.!

LoreCruz
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2017