Un gato negro decía
me seduce mi castillo
nunca tantos ratones veía
vestidos de amarillos
Y como uvas vampiros
colgados de los pestillos
me venían los suspiros
llenándome los bolsillos
Y...apareció la bruja
ama de ese corral
me convertí en burbuja
para no pasarlo mal.
De un manotazo agarre
al búho que aleteaba
por el suelo rodé
con mi presa agarrada.
Grande fue mi sorpresa
al mordisco que le dí
una gatita era mi presa
y al verla me sorprendí.
Fuí su felino varón
amándola sin su faja
le maullé al corazón
acostados en una caja.
Pero al llegar la media noche
el sortilegio falló
la bruja salió de noche
solo el recuerdo quedó.
Quiero ahorcarme ahora
por mi gatita benévola
la bruja llegó a la aurora
con el búho que no vola.
Un encontronazo me dió
la bruja mala y envidiosa
el búho lo aleteó
pensándola que era su Diosa.