Maria Hodunok.

Amor otoñal.

 

Cuando llega el otoño de una vida intensa,

los sentires del alma son muy diferentes,

las llamas de la pasión otrora inmensas,

se convierten en suaves, dulces, silentes.

 

Es mucho mas delicioso amar con cariño,

disfrutar largos minutos en éxtasis delicados,

hasta que el cuerpo, rendido como un niño,

se abrace con ternura al corazón enamorado.

 

El amor otoñal es como una fruta madura,

que la sostienes con tan amoroso cuidado,

que se derrite en tu boca con gran sabrosura

y deja que su cuerpo te abrase extasiado.

 

Es pura dulzura, es suave como blanco algodón,

es amor, es amistad, es cariño, es suavidad,

es una entrega total que nunca debe pedir perdón,

no hay celos ni rencores. solo una gran lealtad.

 

El amor otoñal llega cuando menos lo esperas,

como una dádiva divina de nuestro destino,

para darte esa felicidad que tanto anhelas

y pensaste que nunca cruzaría por tu camino.

 

María Hodunok.