Si nos abandonamos al desamor
obtenemos el espanto de vivir en el vacío
y los días se dejan pasar sin huellas,
sin sol, sin explosiones de claridad.
Y quedamos abandonados en la soledad,
sintiendo la necesidad de amar y ser amados,
hasta en las uñas; socavando el pecho;
sintiendo tan solo un hueco...
¿Cómo volver a recapturar el tiempo?
Interponiendo el cuerpo frente al desgano
para hacerle retroceder acobardado
con una inquebrantable decisión.
Ya no habrá oscuridad ni llanto.
el aire se enhebra con amor
envolviéndonos en consignas hermosas
deshaciendo pobrezas y malos augurios;
ofreciendo nuestras manos; inventando
nuevas caricias con que cantar
las buenas formas de amar.
Gritando por valles y lagunas
esos momentos en que disfrutamos,
porque estás, sin estar, pero estando...
daré vueltas buscándote
y te encontraré allí...
tan cerca...
cerca de mí.