SU SENSUALIDAD EN LA NOCHE
En ese momento el tiempo se detuvo entre sus manos; jugaba frente al espejo y conversaba con su reflejo. Su alegría inundaba la habitación; y su copioso cabello largo, bailaba entre sus hombros desnudos con exquisita sensualidad y sonrojando a la noche. Sus pupilas estaban como una puesta de sol, más sonrosadas y más humana; donde el mar y el ruido de las olas eran una delicia. Con ella se desvestía la noche y con ella mis pensamientos se iban a todas partes, dispersando su esencia en mí como el rocío en la aurora.
Autor. LMML.