Ya no suenan
las campanas
ni escuchas
mis palabras . . .
toma tus armas
y despierta,
mi cuerpo desea
ser recorrido
por tus manos
y tus labios,
milímetro a milímetro
vacía tu chistera,
pon tu fantasía
y cuéntame en silencio
cómo amarnos.
Yo quiero que me ates
sin grilletes,
con cinta suave
y quiero atarte,
atados y desatados,
suaves, apasionados.
volcán en erupción,
Ave Fénix que vuelca
su lava emocionada,
su pasión desatada
ÁGORA