Cierro los ojos, te hallo en la memoria
desbordas las costas de los pensamientos
canto de esperanza silenciando agobios
lluvia de fe para las marchitas ansias de vida.
Como sombra de mi ser acompañas el andar
pares los sueños, amamantas su existencia
eres sangre anhelante para las derruidas venas
luz de mi interior mostrándome la esencia.
Fluyes incesante con el paso de las horas
te percibo en la brisa que abraza las ilusiones
conjuras los pesares, haces aletear las emociones.
Abro los ojos, te hallo en la realidad de mi día.
Oscar A. Fernande Folguerá (Argentina)
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