Después del silencio
suena una guitarra,
por sus siete cuerdas
se derrama el alma.
Sus hermosas notas
vibran en el viento,
son como palomas
que vuelan sin miedo.
Dulce melodía
que rasgas siléncios,
rompe las cadenas
de mis pensamientos.
Tañe la guitarra
sus coplas sinceras,
de sangre caliente,
de clamores llenas.
Sueños de colores
llantos y tristezas,
alegres amores,
vibrando en tus cuerdas.
Los bellos quejidos
de dolor y pena,
son las emociones
más fuertes, más tiernas.
Las grandes pasiones.
los vuelos de faldas
con sus faralaes
que sienten y bailan.
Mi amada guitarra,
guitarra española,
que bellos acordes
duermen en tus notas.
Tu siempre enarbolas
el sentir de España,
tantos corazones
que laten al ritmo
que tu cante emana.
Loli Ojeda