Tu me atajaste luz de la aurora
Como un sueño
Que se cruza a toda hora
Veo luces en rosas
Espíritus florales
Que encienden mi perfume primigenio
Veo albures en la disposición de las cosas
Como la brisa de un hábito
Como la montaña
Inspiradora
En el mundo figuras
Arcos
Me deboran
Como perlas precisas de eterno retorno
Con perfiles encendiendo su infinito hacia lo recóndito
En atardeceres purpuras vi tu verde y me anaranjé completo en su suave manto de ternura
En tu magia alojé mi risa
Con que recuerdo sentir
Mi paso absoluto
Diluido
Entre los niños