Un cisne desnucado debo ver
Para arrancarme de la inóspita
Carcel en la que crujen
Mis huesos a la redonda
Mesa mientras no vivo
Ni disfruto mis ceremonias
Vacías de coraje
Punto aparte he seguido
Decidiendo poco
Mientras me enfermo
Habitan en mi rugidos
Poderosos infimos nidos
De sierpies mal llegadas
Infinitas mis plegarias
En el mundo de mi labia
Existen infractores
Que castigan mi errabundo
Sonido de flagelo
Desde mi craneo hasta mi garganta
Equivocandose en la entrega
Posponiendo sus letras
Para sus noches pequeñas
Aventuras entre corales
Desconectados túneles
Precipitame por los umbrales
Irresolutos de tus lugubres
Sinfonias desgarradoras
Aterrando mi cabeza
Y en el centro de mi pecho
Mi mi alma grita sin modales
Y se come la insistencia
De mi conducta peligrosa
Mientras el día solloza
Salvame de este humo
Que intoxica mis ideas
No me dejes morir en sinagogas
Llevame a las aldeas
A los pueblos en que el fuego
Mece pupilas satisfechas
Y endereza mi rumbo
Hacia la mano de hermosura
A la excelencia que perdura entre el viento
Y cúrame con flores
Esta primavera
Amén