Paloma P.P.

Los olivos

Los campos andaluces

hermosean con la luz del sol

y nos muestran sus frondosos olivos

con sus exuberantes ojitas y aceitunas.

Se conjuntan formando hileras

iluminados por la luz del sol.

Olivares coloreados de naranja

lucen su belleza en el ocaso

por la noche los olivares nocturnos

reciben los rayos de luna plateada,

los campos lucen al amanecer,

cual hermoso enjambre de olivos.

Ojalá tantos olivos enseñen

en primavera sus flores racimadas

en el otoño sus ramas empapadas por la lluvia torrencial.

Olivar por el caminito tus olivitas irán

caminando en carromatos

dirigiéndose a los molinos

donde son trituradas por los campesinos

para elaborar el aceite de oliva

que nos aliña todas las comidas.

Bajo tus ramas pasaron mil vidas,

una pareja de enamorados,

 niños jugando en el campo,

agricultores andaluces,

ancianos que se sentaban en el banco a contemplarse.

Y yo me pregunto cuando te veo

¿Cuántas vidas se esconden en cada una de las aceitunas?

¿Cuántos te han necesitado?

¿Cuántos han llorado?

¿Cuántos han  sudado?

Es un árbol que embellece los campos andaluces

Y cuando te contemplo siento paz.