Otro día sin ti,
pero un rayo del sol entra a mi ventana
me levanto muy temprano,
preparo un suculento bocado
para irme a mi trabajo.
Que bonito es por no tenerte en casa
porque hiciste mojar mi pupila con tu engaño,
como te amaba mucho te aguante tanto.
Hoy que no estás, mis días son espectaculares
llega el ocaso y ruego a dios que no estés en mi alcoba
que feliz soy, hasta quiero buscarme otra para que te reemplace.