Aquí me tienes,
víctima de la distancia,
víctima de tus palabras.
Sentada frente a mi ventana
con mi gata fiel,
mi más bella y leal compañía.
Bosquejo una pintura
para hallar en ella respuesta a tu partida,
presiento a medida que esta va tomando forma,
qué en ninguna forma tu estabas.
Ya terminando el lienzo encuentro,
y es ahí cuando lamento,
qué no supe darle el color que esta solicitaba.
Tal vez no use el pincel correcto,
tal vez no eran las pinturas adecuadas.
Más en esta hora muerta de mi vida,
miro a través de mi ventana,
vislumbro tu figura,
quimera, fría, sosegada,
irrumpo de nuevo en mi pintura,
y con más desenfreno que cordura,
doy un golpe certero de matices.
Ahí estas como cual fotografía ,
altivo, tembloroso, jadeante de deseo,
vivo, presente,
no muerto, no olvidado.
No has tardado, no era tu partida,
más bien te he dejado demasiado temprano.
aquí estoy cumpliendo la décima quinta y última cita.
LoreCruz
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2017