Alfredo Aguilera

Corazón fragmentado - Causa y efecto

 

He llevado a cabo los preparativos necesarios pues es momento de darte algo a cambio, llegó el tiempo de darte algo mío que tu recuerdo ha inspirado.

Es lo justo y lo más acertado, el entregarte en versos apasionados lo que siente este corazón ya fragmentado.

Ni en mis sueños más descabellados habría imaginado encontrar tan dulce engaño, aquella imagen de un amor malsano.

Aquel que me dio vida y me ha matado, ese que se adentró en lo más profundo de mí ser tan torturado.

 

Eres alegría de mis días y desesperación de mis noches

Eres lo que amaría toda mi vida sin dar reproches

Si no fueras quimera efímera que aparece en mi mente  para consumir mi ser agonía

Agonía por un sentimiento que no crece y al contrario se desvanece

Agonía por un presente tortuoso que no cambia.

 

Eres la ilusión más dulce que mi mente ha creado

Eres el cúmulo de sentimientos de un ser necesitado.

Triste es que en la realidad seas otra

Triste es que no pueda hacer sentir en tu ser ni una porción de lo que yo siento

Triste es saber que de todas las veces que te tuve en brazos jamás probé tu aliento

Triste es para mí que aunque yo te amé he de morir en el vano intento.

 

Más no me arrepiento y ahora mas que nunca quiero hacerte  saber esto que siento

Que comprendas que para mí este amor no fue un juego y que realmente quize compartir contigo mi ser por completo.

Soy consciente de que por mis errores lentamente estoy muriendo

Pues si ahora me embarga esto, no me lo provocó más nadie que mi desesperado intento de encontrar en ti un consuelo.

Fuiste todo en su momento, fuiste el mi camino y mi cielo, eras tu causa y mi amor efecto.

 

Yo un tonto desconsolado, un lastimero mendigo de tus afectos tan preciados, de tus caricias robadas

De tus palabras amables, fui un soñador enardecido carente de todo sentido

Embriagado de amor injusto, tan entregado y perdido pues en su existencia no encontró ser del todo correspondido.

Fueron tantas las cosas que imaginé a tu lado

Serán aún más los proyectos que no llegarán a verse concretados.

 

Quisiera sostener una vez mas tu mano, mirar esos ojos que mi perdición desataron

Corromper mi ser una vez más con tu presencia

Abandonar toda esperanza, decir adios a la clemencia

Caer en el vacío de la locura pues es este deseo lo que me me impulsa

Caigo sin resistencia en tu recuerdo para luego darme cuenta que nada de eso es cierto

 

Es entonces cuando mi ser abatido cae de golpe en el exilio de tus besos

En el abandono de tu cuerpo, en la ausencia de tu amor sincero

Me invade el desolado tormento, la verdad me llena de desconsuelo, tú no me quieres y eso lo entiendo

No deseas mi compañía en estos momentos,  yo no representó tus desvelos ni tus sueños

No formó parte de tus anhelos, no soy ni seré objeto de la pasión de tu ser inquieto

No seré aquel que tu mano guíe, no soy aquel que a tu lado camine, no fui ni seré de tu amor objeto

No pasaré de ser solo un recuerdo, sere para ti aquel que ilusionado intentó abandonar todo tanto que se abandonó a sí mismo.

 

No sabes aun lo que por este amor he sufrido

Lo mucho que me duele arrojarte al olvido

Sofocar mi deseo por ti en el silencio tan temido.

¿Pero qué caso tiene decirte lo que he sentido?

¿Qué ganas tú con saberlo y yo con decirlo?

 

No malinterpretes mis palabras, no es que yo no quiera de ti más nada

Pero he llevado al límite mi alma, no puedo más con esta carga, no soporto más conservar la esperanza

Comprendo a la perfeccion quel a gente no cambia de la noche a la mañana.

Soy actor principal de esta historia en donde se pagan caros los errores

Soy participe de mis temores, soy verdugo y juez de mis sinsabores, culpable de mis desilusiones.

 

Ahora eres libre, te dejo marchar de mi vida

Encuentra en este mundo lo que llene tu alma

Encuentra aquel que sea merecedor de tu compañía

Uno que sienta la virtud de tus labios, que perciba el aroma de tu esencia tan lasciva

Que te tome en sus brazos cada día, que haga contigo lo que yo jamás pude vida mía

Que te dé a ti la alegría que tú me diste y que despierte en ti lo que conmigo dormía.

 

Ambos sabíamos que este día llegaría,

Supongo que igual que yo querías ver quien el primer paso daría.

Es triste este final para nuestro encuentro

Sin embargo debo insistir en que no me arrepiento, pues fui muy feliz en su momento

Es con esto que me despido, lamento si fui grosero.

Perdóname por mis arrebatos, perdóname por siempre ser sincero

Disculpa a este pobre hombre que al ver a la luna tan bella reflejada en el agua

Intentó con todas sus fuerzas sacarla y murió sin darse cuenta cuenta de  que solo era el reflejo lo que apreciaba.

 

Perdón…

Deberás perdón.