En el silencio de la noche,
mi alma llora de soledad,
las lágrimas empapan mi corazón,
porque me he quedado vacía de amor.
Los recuerdos golpean mi mente.
Entre las nubes grises del cielo
vierten sus lágrimas la luna y las estrellas,
que apenas brillan,
la noche llora su soledad
en medio del silencio y la oscuridad.
Las montañas se cubren de un manto negruzco,
el mar ruge débilmente porque sus olas se apagan
camino por un trayecto desconocido
dominada por la melancolía
y no sé adónde voy.